Microsistemas que transitan por todos lados y en todos los sentidos, sistemitas diría yo, ecosistemas a veces tan pequeños que el universo pareciera estar debajo de mi cama, junto a la basura que aguarda ahí con el anhelo de ser recogida algún día, otras veces tan grandes que a ese mismo universo solo lo podemos ver en EVE. Sistemas computacionales que nos esclavizan y nos ponen a su merced, humanidad versión 2.0 con Windows vista (y centrino core 2 duo pa´ que jale con madre) o algo así. Hay de sistemas a sistemas. Un sol que se ve rodeado de ocho planetas, antes nueve (el sistema solar) y de hartos satélites conocidos también como lunas. Todos danzan y giran para su gracia. Hasta en éste hay inconformes y desertores, pobre Plutón lo abrieron a la mala. La sistematización del hombre y su afán por agrupar todo en sistemas, el sistema de los objetos de Baudrillard, libro que desenmascara la aberración de la que nos jactamos como sociedad, pero sigan consumiendo.
Hay un sistema bien raro, el sistema de cosas, así lo llaman los fatalistas que van de puerta en puerta pregonando el fin del mundo, por lo regular podemos apreciar a estos seres extraños los fines de semana. Ese es el término despectivo que ellos usan para llamar a la sociedad misma. Un sistema del que son parte. También esta el sistema métrico decimal, que por su función es infinito y perfecto, casi perfecto. Lo seria si pudiera medir la distancia de cuando te digo hasta donde te amaría.
Sistemas, sistemas, sistemas… escolarizados la gran decepción, no puedo imaginar que de un día en la UNAM aprendí mas que 5 años en una carrera, de estos ahora también los hay a distancia pero de ello ni hablar. Puros corajes con el sistema educativo. Hablando del “sistema”, están los detractores del sistema social, los llamados antisociales, la llamada escoria de la sociedad que, pues a veces, le aportan más haciéndola ver sus errores. No hay nada menos social que ver la TV o estar escribiendo algo pa´ publicar en el blog del que ni mis amigos dejan comentarios. Hasta teorías de los sistemas hay, y ahí no para, también hay clasificaciones. Están los físicos y los abstractos, los abiertos y los cerrados. La ciencia de los sistemas.
Pinche locura de sistemas.
…de los sistemas a la locura
Hay un sistema bien raro, el sistema de cosas, así lo llaman los fatalistas que van de puerta en puerta pregonando el fin del mundo, por lo regular podemos apreciar a estos seres extraños los fines de semana. Ese es el término despectivo que ellos usan para llamar a la sociedad misma. Un sistema del que son parte. También esta el sistema métrico decimal, que por su función es infinito y perfecto, casi perfecto. Lo seria si pudiera medir la distancia de cuando te digo hasta donde te amaría.
Sistemas, sistemas, sistemas… escolarizados la gran decepción, no puedo imaginar que de un día en la UNAM aprendí mas que 5 años en una carrera, de estos ahora también los hay a distancia pero de ello ni hablar. Puros corajes con el sistema educativo. Hablando del “sistema”, están los detractores del sistema social, los llamados antisociales, la llamada escoria de la sociedad que, pues a veces, le aportan más haciéndola ver sus errores. No hay nada menos social que ver la TV o estar escribiendo algo pa´ publicar en el blog del que ni mis amigos dejan comentarios. Hasta teorías de los sistemas hay, y ahí no para, también hay clasificaciones. Están los físicos y los abstractos, los abiertos y los cerrados. La ciencia de los sistemas.
Pinche locura de sistemas.
…de los sistemas a la locura